El humor negro es aquel que hace reír sobre los temas más dramáticos (la muerte, la enfermedad, la injusticia, la pobreza…), cuidadosamente evitados en cambio por la comedia ligera (vaudeville, por ejemplo). Provocador, el humor negro se basa principalmente en la ironía (decir algo para expresar lo contrario): enuncia ideas impactantes de manera ligera, para denunciar la hipocresía social que lleva a ocultar los temas más perturbadores. El humor negro es, por lo tanto, un humor de segundo grado, que reclama el derecho de reírse de todo, pero no con cualquiera (según la famosa frase de Pierre Desproges), es decir, no con aquellos que, fingiendo tomar este discurso irónico al pie de la letra (sobre un tema como el racismo, por ejemplo), querrían hacer una apología de lo que precisamente denuncia. Cuando el francés Coluche, en sus sketches, hacía comentarios racistas, era para burlarse de los racistas…
Muertos de la Risa
Nochevieja en la morgue
Un Ataúd para Dos
Sin flores ni coronas